Google comenzó a experimentar hace siete años con tecnologías de conducción autónoma y el proyecto ha alcanzado el punto en el que la compañía decidió que era momento de separarse de su empresa madre. Ahora llamado Waymo, el programa seguirá como una entidad independiente bajo la sombrilla corporativa de Google Alphabet, pero será completamente autónoma.
El proyecto de vehículos autónomos de Google hizo su primer trayecto de pruebas en octubre de 2015 en Austin, Texas. Desde entonces ha acumulado más de millón y medio de kilómetros en pruebas y el objetivo final es proporcionar esta tecnología a varios medios de transporte, ya sean servicios de autos compartidos, camiones de carga o vehículos particulares.
El enfoque que está dando Waymo a la tecnología de conducción autónoma es el de lograr que el auto se condusca sólo sin la necesidad de que un humano tenga que estar presente para monitorear el sistema, deshaciéndose por completo de los controles tradicionales de un auto. Por el momento esto no será posible aunque logren que el sistema funcione a la perfección ya que las leyes obligan a que haya una persona que pueda tomar el control del auto en caso de que algo falle.
La idea de un auto sin controles convencionales será un poco más difícil de digerir por el consumidor promedio. Nos encanta la idea de que el auto se maneje sólo cuando está en un embotellamiento de tránsito, pero habemos muchos que nos gusta conducir y esta visión que tiene Waymo elimina esa opción. También es importante considerar la desconfianza que el público puede tener en un auto que sabe no puede controlar de ninguna manera. Habrá que esperar para ver qué tan aceptado es el sistema en un principio, porque seamos realistas, todos sabemos que los vehículos autónomos sin volante son cuestión de tiempo.
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