Lo bueno, lo malo y lo feo de comprar un auto nuevo que está a punto de renovarse

Es probable que ha más de uno le haya pasado que justo unos meses o incluso semanas después de comprar tu auto del año, hayas visto en las agencias o las calles un modelo totalmente nuevo y diferente al tuyo. O bien estabas informado que vendría un cambio y aún así en vez de esperar al modelo nuevo decidiste ir con el que iba de salida.

Analizamos las ventajas y desventajas que podrías encontrar si haces esto, ya que sinceramente puedes sacar mucho partido de eso, o sentirte mal por no haber esperado lo suficiente por un modelo más nuevo y que te gustara más.

Ciclos generacionales

En la industria automotriz generalmente los autos tienen ciclos que abarcan desde su presentación y llegada a los concesionarios, cambios estéticos menores por cada año y al menos un cambio estético, de motores o alguna función o equipamiento más relevante al mitad de su ciclo de vida; seguido de más detalles por año hasta que termina su ciclo y llega una nueva generación.

Estos ciclos, dependiendo el coche y marca, llegan a durar entre cinco y ocho años, aunque claro, hay autos en los que sucede antes o mucho tiempo después.

Las mejoras pueden variar, yendo desde mejor aprovechamiento del espacio, el uso de una plataforma nueva, mejores motores, más equipamiento y demás, aunque no siempre es sea una revolución total.

¿Cuáles son las ventajas de comprar un auto que está por terminar su ciclo?

De este lado de la balanza puedes encontrar descuentos atractivos en todas las gamas, o promociones que te facilitan adquirir el auto o mantenerlo. Generalmente esto pasa para que los concesionarios no se queden con inventario atrasado y puedan tener espacio para los nuevos, mismos que serán la nueva fuerza de ventas para la marca y el concesionario.

Puedes encontrar bonos, promociones para el seguro, paquetes de mantenimiento, la aplicación de algún opcional de regalo u opciones más accesibles para el financiamiento del auto. Esto varía acorde al modelo y la marca, pues habrá algunas que te den promociones muy buenas y otras que simplemente no aplicarán alguna.

También, hay grandes posibilidades de poder llevarte un auto con un equipamiento mayor al auto de precio equivalente de la nueva generación. En el 99% de las veces que hay un cambio de este tipo, el modelo nuevo llega con un precio superior en todas sus versiones. Entonces tal ves en la generación saliente puedas llevarte el tope de gama, mientras que en la entrante estarás en el rango de precios de alguna versión intermedia.

En el lado de las refacciones, puede que sea más fácil encontrar para un auto que lleva ya mucho tiempo en el mercado, en caso de requerir alguna al poco tiempo de comprarlo, además no debería ser problema la falta de las mismas, pues por ley, deben existir repuestos hasta 15 años después de que cierto modelo dejó de producirse.

Finalmente hay quienes dicen que un auto ya con varios años a la venta está más probado ante cualquier situación, ya que los últimos modelos armados, vienen con menos problemas de todo tipo, porque ya fueron corregidos los problemas de los primeros lotes. Hasta cierto punto tiene un poco de veracidad, sin embargo, recientemente los problemas que caracterizaban a los primeros lotes de autos de una nueva generación han ido desapareciendo debido a los procesos de pruebas y estándares más rigurosos que los fabricantes deben seguir. Además, a ellos mismos no les conviene que sus primeros productos salgan mal y les genere una imagen mala a futuro.

¿Cuáles son las ventajas de esperar a que llegue la nueva generación?

Del otro lado de la balanza podemos encontrar la llegada de todos los componentes y materiales nuevos que pueden hacer mejor al coche. Si puedes costear el incremento de precio del nuevo modelo, entonces estarás adquiriendo un producto más actual, con sistemas y equipamiento mejorado.

La tendencia es hacer cada vez más eficientes los motores sin tener que sacrificar potencia, entonces, es probable que el auto más nuevo tenga un motor que te ayude a reducir los consumos de gasolina y que probablemente sea más ligero, por ende mejorando la calidad de manejo. No es el caso de todos, porque algunos mantienen la misma plataforma y motor, y sólo le dan una puesta a punto nueva, pero generalmente habrá una mejora, aunque sea pequeña, pero mejora al final del día.

La devaluación puede ser un factor importante, siempre un auto seminuevo más actual, tenderá a conservar un poco más de su valor sobre un modelo de generación anterior. Si planeas quedarte con el auto poco tiempo, entonces considera este factor.

Finalmente, un poco del lado subjetivo, pero que para muchos tiene grandes implicaciones, es que tendrás un auto que luzca más actual y para el que constantemente llegarán algunas mejoras que podrás comprar como opcional.

¿Entonces, espero al nuevo o me quedo con el que se va?

Es cuestión de perspectiva y de entender que es lo que de verdad necesitas. Si tu liquidez es buena, puedes y quieres absorber el incremento de precio, entonces no lo dudes y busca una versión más actual. Por el otro lado, si prefieres ahorrar un poco y sacrificar ligeramente un par de mejoras, ve con el modelo que va de salida. Los modelos que van saliendo, no se van porque ya no son eficientes, seguros o aptos de seguir entre nosotros. Simplemente obedecen las reglas de consumo, pues hemos tenido ejemplos de autos que han durado más de 10 años de la misma forma y siguen siendo buenas compras.

Dichos autos podrán seguir en pie durante muchos años y no darte problemas mayores mientras no llegue una revolución de golpe en la que al instante los vuelvan obsoletos, y claramente eso no pasará fácilmente.

Hablando desde mi trinchera, decidí hacerme de un SEAT Ibiza FR SC, de los últimos que se produjeron antes de la llegada de la quinta generación. Obtuve un descuento nada despreciable y me lleve a casa el auto más completo por 60,000 pesos menos de lo que cuesta el equivalente FR de la generación actual. El equipamiento es similar en ambos, teniendo una leve ventaja el nuevo.

Donde más se nota es en el apartado de motor, pues con un cilindro menos y una plataforma nueva, el más reciente es más eficiente y amplio. Sin embargo, aún con el viejo motor 1.2 TSI los consumos son bajos, el equipamiento bueno, la seguridad está ligeramente por encima de la media y el manejo es divertido. Además cubre mis necesidades sin problema alguno.

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